jueves, 22 de abril de 2010

Limbo Subterrenal

Totalemente de acuerdo. Lo de sala de espera me encantó. Y el subte? Vos te acordás de un documental que pasaba De Carli, que entraba un tipo en el subte y veía lo que soñaban los pasajeros? Sin ser surrealistas, juntamos allí a los personajes viajando, esperando en ese trance que es el camino bajotierra. Y sería un film que se interrumpe en cada estación. La nocíón de Limbo nos lleva de un tirón a la más bíblica de Purgatorio por el mismo motivo que describe J.F.C. (Julio/Jesus Florencio/Fucking Cortázar/Christ!), es el entre de los que no han sido ni del todo buenos ni del todo malos. Los cínicos, los Fantasmas que deben resolver sus cuestiones para salir de allí. Deben resolver las pequeñas historias para llegar a la próxima estación. Las opciones son varias pero coincido con que sea un limbo terrenal. O subterrenal.

Todas Las Hojas Son del Viento

Bueno, estamos por la buena senda posmoderna. Supongo que tendríamos que armar la historia global, crear unos personajes cliché, o cual mejorará la comunicación entre los escritores respecto de las reacciones que pueda tener cada personaje en uno u otra situación, y luego derivar hacia el caos-ordenado. Es casi como un Big-Bang, una Creación o un tiro al arco (y tantas cosas más), como ocurre con las hojas, que son del viento porque las mueve hasta en la muerte, por ese impulso inicial, fundacional. Es un gran desafío el ver qué ocurre con nuestro disparador, ver como se reasume la historia en distintas instancias y dónde desembarca o naufraga la cosa en general. Espero que el eyaculador de la coherencia interna nos asista para que no haya demasiadas inconsistencias.



Me agrada lo del limbo, me agrada la indeterminación del limbo, pero ¿sabés qué? Creo que ganamos mucho cada vez que nos animamos a hacer transcurrir las cosas en el mundo real. Así como Borges cuando menciona hechos cotidianos hasta el hartazgo de mencionar conversaciones con Bioy, me parece que la verosimilitud se alcanza interpelando desde lo cotidiano y extrañándolo. Hay un capítulo que marqué de Último Round donde se trata largamente la cuestión del cuento corto y, en particular, del cuento corto fantástico. En fin, pensando en todo esto se me ocurre que hay que buscar un limbo en el mundo terrenal. ¿Qué es un limbo? Un interregno, un entre, una cosa que no ha dejado de ser algo para ya empezar a ser otra cosa; o que ya ha dejado de ser algo y aún no ha empezado a ser otra cosa. Entonces, pienso que el espacio debería ser una sala de espera, un andén, una terminal, un aeropuerto y esto, claro, me remite al Sr. Adam Maxwell Godot –cuya figura en realidad estaba encarnada por el Coronel Ítalo Peck, si no mal recuerdo-, y a otros infiernos; el tedio como caldo de cultivo, el fin de fiesta, la tardecita.

Crossover/Limbo

Anotado el Looping. Y en cierto modo, la participación de los personajes en más de un relato me recuerda lo que en los comics entendíamos como Crossover, no? Cuando Batman aparecía en la Superman porque el Joker estaba en Metrópolis. Con las distancias que se generaban entre los estilos de cada revista/superhéroe. Por ejemplo, Batman llevaba toda su lobreguez a la habitual ingenuidad de Superman.

El Film lo pienso como secuencias en una gran mansión-Limbo. Un lugar al estilo del Purgatorio donde se encuentran todos los personajes, vagando por los rincones. No tiene que ser una relato tradicional necesariamente lo que se mueestre en el film, sino más bien como un recorrido por las salas como en El Arca Rusa, y hacemos pequeños gags y guiños de recurrencia con frases o acciones que se repiten respecto de las historias particulares.

Looping

Quizá no sea el ejemplo más feliz, pero me lleva a pensar el modo en que las distintas historias van a relacionarse en el plano de la historia. Se me ocurren la simple recurrencia, la causalidad lineal paradójica (éste es el caso) o la sobredeterminación. Como para ir definiendo. Me gustaría que cada personaje intervenga en dos historias, a modo de enlace.

Qué es LOOPING ???
Para quien no conoce el concepto de looping, es un término que crearon los informáticos para definir un enredo de los
tantos que han creado y para lo cual no tienen una explicación sencilla para aclarar el problema, que algunos llaman
recursión infinita.

Haciendo poco esfuerzo trataré de explicarles en pocas palabras este famoso término.
Se dice que un programa de computación "entró en un looping" como cuando ocurre la siguiente situación:
El DIRECTOR llama a su secretaria y le dice:

Vanessa, mi vida: Tengo un seminario en Río de Janeiro por una semana y quiero que me acompañés para que conozcas a
mis socios y nos masacremos en la playa una semana. Hacé los preparativos del viaje...
La secretaria llama al marido:

Juan, mi vida: Voy a viajar al exterior con el director por una semana.
Cuidate, querido.
El marido llama a la amante:

Leonor, mi tesoro - Mi jermu va a viajar al exterior por una semana,
vamos a pasarnos esta semana juntos, mi reina...
La amante (que es maestra) llama al niño a quien le da clases particulares:

Manuelito: Tengo mucho trabajo la próxima semana.. No tienes que venir
a clases...
El niño llama a su abuelo:
Tata - La próxima semana no tengo clases, mi profesora estará ocupada.
Así que por fin... ¡Vamos a poder pasar la semana juntos!!
El abuelo (que es el DIRECTOR en esta historia) llama a la secretaria:
Vanessa, vení rápido: Sorry mi vida, suspendé el viaje porque voy a pasar la
próxima semana con mi nieto que hace un año no veo, por lo que no
vamos a participar en el Seminario. Cancelá el viaje y el hotel y en dos meses armamos otra luna de miel.
La secretaria llama al marido:
Juan: El hijo de p u t a del director cambió de idea y acaba de cancelar el
viaje,

El marido llama a la amante:
Amorcito disculpe - No podremos pasar la próxima semana juntos, el
viaje de la te to na de mi mujer fue cancelado.

La amante llama al niño de las clases particulares:
Manuelito - Cambié de planes: esta semana le voy a dar clases como siempre.

El niño llama al abuelo:

Abuelo, la vieja de mi profesora me dijo que esta semana tengo clases
normales, discúlpame, no voy a poder hacerte compañía.

El abuelo llama a la secretaria:

Vanessa, mi reina: Mi nieto me acaba de decir que no va a poder estar
conmigo esta semana porque tiene clases. Así que comprá nomás los pasajes y la tanga
roja para ir a Río de Janeiro...
¿Les quedó claro lo que es un looping...?? ?

viernes, 16 de abril de 2010

Las Buenas Consciencias

Muchachos, los invito a leer un pequeño poema de Julio, entre los últimos en Papeles Inesperados, que me parece un Mojón en la Ruta que lleva a la Nueva Cosa que hagamos. Añadí en el documento, además de eso, algunas respuestas de correo que habían quedado fuera. Y agrego yo ahora que me entusiasma de sobremanera pensar en las Posibilidades de la Forma (que no es más que el Contenido) que la Nueva Cosa tendrá, por ejemplo, poder nuclear aquellos amigos y aquellos bastiones que hemos desperdigado a lo largo de este tiempo. Pienso por ejemplo, en una performance en vivo en Córdoba, un fin de semana perdido dentro de la Temporada que planifiquemos. Y así...

Sos así: inteligente, clara, refinada,
vivís en armonía con las gentes, las cosas y las plantas
que has elegido despaciosamente,
rechazando sin ruido lo que quebraba el ritmo diurno,
la calma de tus noches.
Eso no significa que ignores este caos,
este fragor de sangre que llaman siglo veinte.
Al contrario, seguís muy de cerca
cosas como el racismo, el apartheid y las trasnacionales,
la sangre en Argentina y Chile y Paraguay y etcétera.
Cada tarde a las seis comprás Le Monde
y te indignás sinceramente
porque todo es violencia, violación y mentira
en Dublín en Beirut en Santiago en Bangkok.
Y después cuando vienen Paulita y Juan y Pepe
les explicás con té y tostadas que esto no puede ser,
que cómo puede ser que esto sea así, y la mesa
se llena de protestas democráticas,
de migas humanísticas y Derechos Humanos (cf. Unesco).
Todos están de acuerdo, y todos sienten
que están del justo lado, que hay que aplastar a Pinochet,
pero curiosamente
ni ellos ni vos han hecho nunca nada
para ayudar (digamos, dieron plata, se solidarizaron
algunos con las campañas periodísticas),
porque les lleva lo mejor del tiempo
aplastar al fascismo con perfectas razones silogísticas
y sentimientos impecables.
Es evidente que leer Le Monde
es ya un combate frente a los que leen el Figaro.
Lo importante es saber dónde está la verdad
y repetirlo y repetirlo cada día
a los mismos amigos en el mismo café.
Casi una militancia o poco menos,
casi un peligro porque en una de ésas
te oye un fascista y ahí nomás te fichan.
Oh, querida, ya es tarde,
andá a dormir pero antes, claro,
las últimas noticias. Mataron a
a Orlando Letelier. Qué horror, verdad.
Esto no puede ser, esta violencia
tiene que terminar.
(Suena el teléfono, es Paulita
que acaba de enterarse.)
Da gusto ver
cómo vos y tu gente participan
de la historia.
Vas a dormir tan mal, verdad, mejor quedarse oyendo música
hasta que venga el sueño de los justos.

Julio Cortázar

Guiños

Creo que lo bueno de nuestra próxima cosa es que desde el vamos permite incorporar todas esas ideas que nos rodean. Me gusta lo del mapa, me parece que puede ser un puente entre lo abstracto de la web y lo concreto de las performances. Quizá podríamos armar una especie de misión simbólica, falsa o no, que podría ser ir a cortarle la cabeza a la estatua de Roca, por ejemplo, en coqueteo permanente con lo que hay de cierto en lo apócrifo. También se me ocurre que podría haber una especie de narrador del futuro, un sobreviviente a nuestra era que cuenta todo lo que estamos viviendo con nostalgia y desdén, un viejo enclaustrado en una biblioteca virtual del futuro fumando cigarros con holográfico. También me gustaría crear una guerrilla que conste de un jefe revolucionario y algunas guerrilleras al estilo de las gatitas de Olmedo y Porcel, que irrumpan en todas las presentaciones para convulsionar la escena. En fin, tenemos que poner manos a la obra en un sentido literario.
Podríamos hacer guiños a nuestras previas grandes cosas. Por ejemplo, la obra de estructura de abismo podría ser como una caricatura de La peste, pero con los actores y los músicos agotadísimos de hacer la obra, empiezan a cambiar los textos y a hacer cualquiera hasta que estalla una discusión y aparecen el arrogante director de la compañía, el productor, etc. O podría ser cualquier otra obra, pero me gusta que parezca que hacen la obra todos los días a la misma hora y están hartos.

Otras Ambiciones

-Cabeza de Goliat: Inspirado en el ensayo urbanístico de Martínez Estrada esto es algo que estuvimos charlando con Fer, se trata de hacer un registro fotográfico de los ESPACIOS de la ciudad. Dentro de la NBT, serían fotos de donde se creen las SITUACIONES. Hacer con ello una especie de Mapa de la "Inseguridad Artística", dedicado a Francisco. Detalles de Estatuas, esquinas, escenas, etc.

-Para dibujo o ilustración animada, considerando este soporte como algo de por sí hiperbólico( qué es sino dibujar), caricaturizar el concepto general que laburemos, el fascismo, el cinismo, etc. con pequeños episodios de un personaje que sea un Dictador exhubertante, a lo Ubú, a la Hitler con sus gestos, a la Chaplin absurdizando todo y armando la serie, la saga que se conecte con las situaciones en vivo (incluso para proyectarlos en la situación).

¿Qué Tal, Julio?

100% en acuerdo con la forma cómica de cada una de los microrelatos. Eso me lleva a pensar, como siempre, en el desdoblamiento, los griegos, y en el cinismo. Por eso, si tú dices comedia, yo diré Tragedia. Ahí es cuando vuelven (o se despiertan, mejor dicho) antiguos anhelos de relatos. El asunto Florencio, la web Rayuela, etc. Y digo, ¿qué tal si todos esos microrelatos fellinescos, desabridos, cómicos, no redundan, en la Historia Total, en una Tragedia al estilo Libro de Manuel? Y allí, me empiezo a responder con los mismos anhelos. ¿Qué tal si esos personajes que pululan en cada relato, que se superponen y que serán leídos de diversa manera, no son en la Historia Total, amigos, o al menos, miembros de un Grupo a la Cortázar? ¿Qué tal si los taggeos, los post no son acaso, los comentarios, los recortes que le dejemos a un Futuro Manuel? ¿Qué tal si de la Comedia vemos nacer la Tragedia? Planteo esto teniendo en cuenta que tenemos que sacarnos las ganas de hacer algo que divierta, que haga reír, de manera nerviosa, con estructuras en abismo, con cliches no probados y, a la vez, aprovechar nuestra trayectoria de lectura e incipiente escritura trágica. Ulises, Miguel, Néstor, Ludmila, Juana, Bernardo y hasta los periodistas del Ombligo en un Palermo minado terminan padeciendo sus errores, suicidándose con sus Julietas apenas dormidas en los brazos. El Viejo Fascismo de cada día, el signo cínico de época que nos atraviesa es sin duda una de las grandes claves. Yo quisiera escribir sobre un director muy metafísico que no puede pasar sus ideas a obra, con un actor totalmente pintado, sin saber qué hacer y no entendiendo nada de lo que le indican ni por qué, con una asistente de dirección, totalmente histérica y pragmática que se vuelve loca y con gentes del público que sugieren pésimas resoluciones que no hacen más que fastidiar al Director. También pienso que este formato, por llamarlo de alguna manera, es ideal para revolver nuestros cajoncitos, sacudir el e-deario, y traer, por ejemplo,el día que Heidegger no fue nazi, aquel corto del hombre desfasado, la Bifurcación/Confluencia, el Banquete Queer, etc.
Cerremos filas sobre el tema o concepto general. Empecemos con los microrelatos o, al menos, ideas sobre lo que escribiremos de ellos. Socializémolos, entramémolos con las ideas de los otros microrelatos y nuevamente separémonos para escribirlos. Y así. Pongamos un plazo para entregar una carpeta sobre el proyecto (un anteproyecto, dirán los jurídicos) este año para realizarlo el año que viene.

Toma de la Formilla

Actualizo lo que se desprende de lo anterior más lo que circuló discursivamente por estos últimos días que ya vienen con el perfume inequívoco de la obra nueva.
Me parece que tenemos que buscar un tema o concepto general que todos tengamos presente, algo bien del mundo de las cosas cotidianas, una posición tomada, un reflejo, una sensación de época. Sugiero: los viejos vinagres o el fascismo nuestro de cada día. A partir de allí, comenzar a recolectar historias que ilustren este tema, que lo expongan, lo esclarezcan y le den la vuelta de tuerca que se merezca, preferentemente en tono de comedia. Así, fellinescamente, entiendo que llegaremos a la idea por un mecanismo complejo: las historias se superponen, se corresponden y en esta dialéctica surge el sentido. Hasta aquí, todavía no hemos hablado de la confección de los guiones. Una vez que tengamos la estructura general de la obra –las historias que vamos a contar, los modos en que se implican unas a otras, etc.-, podremos darnos a la escritura fina, aprovechando los diversos estilos, las distintas perspectivas, para dar a luz distintos guiones. Todo esto debería plasmarse, por fin, en la obra, que finalmente estará hecha de cortometrajes, músicas, piezas teatrales, dibujos animados y cuanta otra cosa se nos ocurra, a presentarse en el transcurso de, digamos, dos meses que serán de vivir la obra por completo, como si fuera un Mundial. El seguimiento integral de la obra podrá hacerse a nivel web, con las características propias de este medio (postear, taggear, comentar, etc.). Así me parece que estaría bueno trabajar.

Sigue la Propuesta

La Obra será original o no será. El aprendizaje del cover o las exégesis más o menos lúcidas nos dejan la idea de que queda mucho por experimentar. Adhiero entonces componer experimentando, volviendo y revolviendo, eso sí, en la resonancia, en el eco de sentidos distantes que nos han dejado otros relatos, otras revoluciones.
La idea en camisón que quisiera escribir consiste en una obra teatral seriada (con capítulos unitarios, autónomos) que se vaya desarrollando a lo largo de una temporada, con un correlato web de video, buscando llevar gente al teatro y, a la vez, empujando a la gente que va a la sala, a seguir por web una alternativa en video. Que el arte no sea una esfera independiente de la vida. Al menos de la vida cotidiana, en principio, burguesa. Un Situacionismo del siglo XXI. Pensé, a raíz de algo que hablamos, en un personaje que sea documentalista cuya ambición es devolver relatos y contenido (Policiales negros, historias románticas, comedias) a esta época del arte separado de la vida cotidiana.
Biografiar la obra mientras se hace es sacudir un poco la pretensión de la cultura historizada y la nihilización de los valores, ese mutismo posmoderno que mencionás, mediante la confrontación de los textos, los relatos con sus propios conceptos, con las verdades y engaños por ellos mentados, por sus duplicidades y por las distancias que nos enajenan de ellos. Y que no es más que una confrontación que busca salvar la distancia urdida entre idea y acto, que busca ligarlas, busca encontrarlas. Ahuyentar metafísicas. Por eso estaremos bien si vamos por el camino de experimentar fijando ideas pero también sobre el propio modo de fijar esas ideas, de medir con qué y de qué manera podemos penetrar en las profundidades de las cosas. Partiendo de la idea de que lo esencial no ha sido dicho. Es una escritura optimista si es consciente desde sí misma, desde sus palabras, sus “guiones” y de las condiciones que generan esas palabras, esos guiones. Y si realmente nos aplasta el clima posmoderno y no podemos decir, por lo menos digamos que no podemos decir.
Hacer el documental de La Peste tenía la intención inicial de retratar las condiciones de producción, después la producción en sí misma nos quitó esa posibilidad o la diluyó. Y más que nada, el no tener un Norte sobre qué hacer con ese documental terminó por hacerlo descansar en la web. Esto me lleva a pensar que esas hojas sueltas, esos planos, o aún fotografías nazcan con una misión clara de configurar otra/otras obras. Para presentar.

Una propuesta

Como primera medida, hacer una obra original. En principio, por una cuestión de principio: no concibo al autor despegado de la obra, de la vulnerabilidad de su exposición; porque estoy en contra de la imagen del autor encerrado en su torre de marfil, como un médium que le baja información divina a los mortales que interpretarán su creación. Se aprende mucho del cover, aún más se aprende de la versión, pero a la hora de la obra, pongámonos a obrar. En segundo lugar, sospecho de cierto mutismo posmoderno, del terror a decir en la era en que nada parece estar prohibido: la censura la ejerce el policía que llevamos dentro, el que nos dice que todo contenido es igual, que todo da lo mismo, que lo mismo da twittear que escribir una obra comprometida y responsable. Ante la posibilidad de decir, prefiero que balbuceemos torpemente nuestras propias realidades en lugar de recitar majestuosamente las de nuestros ancestros. Last but not least, quiero dejar bien en claro que La peste en modo alguno agota las posibilidades de comunicación entre las diversas disciplinas en que la actividad creativa parece haber estallado en nuestro tiempo. Tomar una obra ajena significa partir nuevamente del teatro como disciplina central, subordinando el resto de los quehaceres. En mi propuesta, de lo que se trata es de concebir una obra que desde sus cimientos contemple las posibilidades narrativas del conjunto de nuestras posibilidades técnicas y creativas, con la convicción de que el todo es mucho más que la suma de las partes. En el entre se nos escabulle lo aún-no-dicho y sólo en ese terreno intransitado tendremos ocasión de aprehenderlo para volverlo lo por-decir. Podría esgrimir algunas razones más –entre las cuales sin duda se contaría el goce pleno de parir algo verdaderamente nuevo-, pero estas son las principales por las que propongo hacer una obra original.

Próxima Gran Cosa

Me digo que esto tiene que quedar en algún lado, y como soy hombre de mi tiempo, me decido a abrir un blog, uno más de los cientos de miles de millones que se abren por milésima de segundo en cada esquina del planeta. No importa, me digo, que digan lo que quieran, todo blog es único y el mío es el más único de todos. Ya estoy escribiendo www... cuando recuerdo que ya tenemos un blog y, si bien nada se gasta, ningún otro árbol se tala, ningún otro ambiente se contamina, ningún otro niño muere de hambre cada vez que yo abro un blog (ahora que lo pienso, no sé si es correcta la expresión abrir para referirse a un blog, ya debe haber algún neologismo al respecto), si bien no hay perjuicio alguno en ello, además de un hombre de mi tiempo supe ser un niño del siglo veinte, época lejana en que la humanidad conocía otros números además de los unos y los ceros y las cosas eran materiales y finitas, cada paquete traía ¿cinco? figuritas; entonces, recuerdo que en alguna parte existe un blog abandonado que probablemente clame por nuevos y picantes contenidos, y me mando. La última entrada es de hace un año y un mes. Eso en este siglo equivale a todos los años oscuros de la Edad Media y un toquecito de Renacimiento. Pero en fin, aquí vamos: han pasado muchas cosas en el medio, Ombligo Producciones se erigió y el viento de la vida nos erosionó, nos fuimos depurando, habíamos hecho radio, hicimos un corto, una movida culturosa que quedará en los anales de la historia y que supo llamarse Umbílica, y ahora estamos terminando la etapa Variaciones sobre la peste, una obra loquísima que -no lo van a creer- combina, de izquierda a derecha, música en vivo, teatro y video. Entretanto, como siempre, va comenzando a aparecer la Próxima Gran Cosa, eufemismo beatle para referirse al próximo quilombo en que nos vamos a meter. Lo que voy a hacer es copiar y pegar, operación posmoderna por excelencia, todas las inspiradas reflexiones que vayan surgiendo en torno a la Próxima Gran Cosa. Es probable que estas pequeñas producciones intelectuales sólo lleguen a conocerse a través del tamiz implacable de la Obra y que tú, lector, no seas más que una imagen indefinida en mi pisquis. Pero, ¿y si no?